Algunos castigos son ciertamente extraños. Como el que aplicó recientemente el departamento de policía de Tailandia a los oficiales que lleguen tarde, estacionen en áreas prohibidas, tiren basura en la calle o no cumplan correctamente con su deber. Nada de cárcel ni trabajo forzado. Deberán llevar un barbijo rosado de Hello Kitty, el ícono nice japonés en este caso usado como signo de humillación.
Según los jefes de la lucha contra el crimen, las advertencias ya no funcionan y están convencidos de que la vergüenza de Hello Kitty puede ser eficaz. La pena es para delitos menores, claro, y por ahora, todavía se mantiene como una penitencia íntima: el barbijo se usa puertas adentro.
Parece que en Bangkok ya hay turistas con cámaras en las puertas del Departamento de Policía Nadie se perdería algo así. Sólo falta saber qué resultados dará l experimento. Y si los barbijos serán de la marca. Porque en Tailandia es más fácil conseguir una copia que el original. De cualquier producto.
Imposible de implementar aquí. Habría que importarlos de China (no hay industria local capaz de fabricar semejante cantidad de barbijos), y nadie podría reconocer al otro en la calle. Inclusive en el ámbito íntimo del hogar, los cónyuges llevarían semiocultos los rostros. Divertido, pero… imposible.
En Tailandia hay muchos articulos truchos, en todas las esquinas, de todo lo imaginable. SIn embargo, con esta medida, creo que se anotaron un golpe bien original. Y kitsch!
Los orientales son bien distintos a nosotros. Recuerdo que hace unos años (no sé si seguiría ahora) los operarios japoneses en protesta seguían trabajando pero con una especie de vincha blanca en la cabeza. Habría que ver si en estas culturas el castigo por el lado del ridículo -convengamos que un policía con un barbijo con el dibujo de Kitty así queda- tiene un impacto mayor que el que tendría aquí. Eso sí, con este sistema los canas «thai» no se van a contagiar de nada….
Si se aplicara esta idea en la Policía de la Provincia de Buenos Aires, la fábrica de barbijos sería de algún comisario y se comprarían por adjudicación directa….
Carolina: la frase «según los jefes del crimen…» fue un acto fallido? Supongo que habrás querido decir «los jefes de la lucha contra el crimen…» en fin, hoy me levanté algo mordaz.
Gracias, Claudio. Parece que vos te levantaste mordaz y yo medio dormida. Aunque, viviendo en Argentina es fácil confundirse en entre policías y ladrones…