Hace un par de meses fui a conocer Ponta dos Ganchos, un resort del sur de Brasil, que ha figurado más de una vez en los ránkings de hoteles más románticos del mundo.
El lugar está a unos 50 kilómetros de Florianópolis, sobre un morro verde tropical. Es enorme, caro y exclusivo: tiene capacidad para apenas 25 parejas. Aún con el resort completo, los 50 huéspedes se ven muy poco. No hay horarios fijos para nada, la mayoría de los búngalows tiene sauna y jacuzzi privado, y se puede tomar el desayuno, almorzar y cenar cuando a uno se le ocurra.
Como escribí en el Reporte de Hotel que salió publicado este mes en la revista Travesías, en Ponta lo raro es cruzarse con otro turista.
¡Qué suerte poder conocer y poder alojarte en un lugar así!
Ser periodista tiene sus cosas buenas (muy buenas, diría yo).
Es precioso- precioso.
¡Wow! Eso sí qué está caro, pero que lindo lo describes, con mucha viveza y nada de adjetivos y adjetivos huecos. Un abrazo apretado Carol
Obviamente me refiero a la crónica completa en Travesía, claro. Otro abrazo
me podrian decir el nombre del hotel?