Veo en Wired el glamour de las azafatas de antes y recuerdo mi último viaje a Bariloche, hace unos pocos días. El refrigerio fue suspendido por posibles turbulencias. Pero el cielo estaba despejado y el avión iba tan quieto que parecía que inmóvil. Igual, no hubo comida y los pasajeros morían por un sándwich y una Coca. Cuchichearon con ganas de una fila a otra. Estaban a punto del motín, lo juro.
Media hora antes de aterrizar tuve mucha sed y pedí un vaso de agua. Me lo dieron, sí, pero debo confesar que sentí que casi me lo dan por la cabeza. En ciertos vuelos da la impresión de que los cielos ya no son amigables. Incluso hay quienes creen que las azafatas de hoy se verían mejor con trajes de guardiacárceles.
Caro,
Acaban de llegar las revistas. Gracias. Me pareció buenísima tu nota de los billonarios. Me cagué de la risa con algunas partes y también me hiciste acordar esa comida en casa de la tía Julieta, ya te contaré qué dice cuando le lea tu texto. Lo bueno es que como ya no ve, le puedo decir que está su foto publicada.
Buena onda que las mandaste, aunque hubiera sido mucho más bonito que las trajeras personalmente.
Gracias y suerte,
Juan
P.D. Coincido en todo lo que dices sobre las azafatas, ahora ya ni siquiera caben entre los pasillos. Deberían ser mujeres de circo.
El Titanic tenia un buen servicio.
Sdos
Carol,
sin duda muchas azafatas muestan una falta de profesionalismo total. O sea que es correcto decir que «azafatas eran las de antes». Pero… y las líneas aereas actuales? Viajé hace un mes por Air Europa y pensé: compañías de aviación eran las de antes… De terror.
¡¡¡Yo creo que las azafatas siguen estando buenas!!!!
No se hagan problemas, con el costo del petróleo a 133 US$ y subiendo, las aerolíneas para achicar gastos de operación, van a prescindir de las azafatas….